jueves, 4 de marzo de 2010

Simpático señor


Estábamos viajando desde Arequipa a Puno, ciudad a las orillas de la lago Titicaca, y después de llegar a la cima de una cuesta encontramos un lugar donde hacer una parada.
Era un lugar con buena vista, con un mirador y algunos puestos de ventas de artesanías. Mientras nosotros caminábamos por allí descansando y tomando unos mates llegó una camioneta con varios turistas. De la misma bajó una chica que traía en sus faldas un cachorro.
La chica caminó hasta unos baños, que se encontraban cerca, mientras el cachorro corría entre nosotros. En un momento dado se encontró con este hombre que vendía sus cosas allí.

No hay comentarios.: